Hombres vs Caballos

Yo confieso…el domingo pasado me salté el entrenamiento, lo cambié por una jornada campestre en la que, que yo recuerde, monté a caballo por primera vez en mi vida. Al final la jornada se prolongó con una comilona en un asturiano y una breve visita a Toledo, para cuando volvía a casa el cansancio, las ganas de siesta y sobre todo los efectos de la fabada me hicieron desistir de entrenar. En fin, día completo de antientrenamiento (relativamente) que, no obstante, no generó remordimientos de conciencia porque al fin y al cabo estamos “fuera de temporada” y si surgen oportunidades de estar con una chica rubia francesa como la de la foto, pues claro, hay que priorizar…

                                     Posando con la dulce Kanouté, trotona francesa...

Lo del caballo muy bien a pesar de que hizo un tiempo reguleras, y en mi condición de torpe natural da un poco de acojono al principio pero merece la pena probar, no se cuando repetiré pero desde luego me quedé con las ganas.

La cuestión es que cuando uno ve a uno de estos magníficos animales, no puede dejar de pensar en lo “paquetes” que somos los seres humanos en eso de correr, pero ¿Realmente somos tan malos?¿Cual es nuestro lugar en el ranking runner de la naturaleza?

Si hablamos de velocidad punta al correr resulta obvio que no salimos muy bien parados, hay muchas especies que nos ganan de largo, desde el número 1, el guepardo (110km/h) , a una lista muy amplia de especies que alcanzan con facilidad más de 50km/h y vale, los humanos tenemos a un tal Usain Bolt que llegó a alcanzar una velocidad máxima de unos 45 km/h, pero, ¿Estamos seguros de que es humano?. Bueno, a lo que iba, con el tema de los caballos me pico la curiosidad por investigar sobre una carrera que se celebra en la localidad galesa de Llanwrtyd Wells en el mes de junio desde hace 30 años (ya sabéis, estáis a tiempo), la Man versus Horse maratón. Esta carrera enfrenta en una distancia de 22 millas (algo menos que una maratón, que serían realmente 26) a hombres y caballos con jinete y en contra de lo que se pudiera pensar a bote pronto, resulta que es una carrera bastante equilibrada que ha sido ganada en algunas ocasiones por los humanos!! (la mayor parte de las veces ganan los caballos, pero los márgenes suelen ser escasos, de unos 10 minutos aproximadamente, vale, 25 si tenemos en cuenta que los caballos tienen un “handicap” de 15 minutos en la salida). La primera victoria humana data de 2004 y se repitió en 2007, según tengo entendido cada año que no gana un humano añaden 1.000 libras de bote al premio así que quien quiera sacarse unas perrillas extra en los tiempos de crisis en los que estamos ya sabe, no estaría mal porque los humanos llevamos ya 5 años sin mojar…por dar referencias la carrera es de tipo rural, no de asfalto y para vencer a los caballos hay que hacer un tiempo de unas 2 horas justitas si hay suerte. La explicación fisiológica del asunto es que los seres humanos parece que tenemos unos sistemas de refrigeración y respiración excepcionalmente buenos dentro del reino animal (de algo tenía que servir sudar tanto) y que por lo tanto somos capaces de sobrellevar un ritmo más elevado durante un periodo de tiempo mucho más prolongado que la mayoría de nuestros primos mamíferos, en resumen, a mayor distancia, mejor situados estamos en el ranking.

Rebuscando, rebuscando, en España resulta que anualmente se celebra también una carrera-espectáculo entre hombres y caballos en la localidad oscense de Lanaja, pero esta  carrera es más corta que la de Gales y por lo tanto está más “trucada”, se celebra  sobre una pista de 250m con un recorrido total de 3km, los hombres corren por el interior y el caballo competidor por el exterior. Además de la diferencia de distancia creo que al caballo se le imponen otras penalizaciones, pero no me preguntéis cuales…

Así que ya sabéis, arriba esa autoestima que realmente estamos genéticamente preparados para correr…

PD. Próximamente…me han asegurado que ya casi está, que casi lo tienen, que ya viene… “¡¡Correr a la última!!”, así que díganselo a sus amigas, que se puede correr con glamour, que esto del running también puede convertirse en una excusa para quemar la tarjeta de crédito :-p...